martes, 15 de noviembre de 2011

Los primeros días de Gato en casa

Ya tenemos a Gato en casa. 

Descubriendo la lavadora y asustándose con el centrifugado
El jueves pasado lo trajimos a casa envuelto en una toalla. Estaba muy asustado y no quería saber nada de nosotros. Se acurrucó en su cojín y pasó las primeras horas durmiendo. 

La llegada

Tras su primera siesta, empezó a andar tímidamente por la casa. Le presentamos su cajón de arena, su bebedero y su comida. Nos deshicimos en mimos y caricias y empezó a sentirse cómodo, a querer jugar con nosotros. Tras unos cuantos arañazos y mordiscos nos dimos cuenta de que quizás deberíamos de empezar a ponerle normas, porque su curiosidad le lleva a explorar los sitios más peligrosos de la casa. En cuatro días creo haber contabilizado cuatro grandes piñas. Las más gordas: el otro día escurriéndose entre el octavo y el noveno peldaño de la escalera (malditas escaleras modernas) y esta mañana intentando saltar desde el sofá hasta una silla donde yo estaba desayunando. 

El sofá es su lugar favorito, Desde allí lo puede ver todo mucho mejor. 
Pero lo que más nos preocupa es su caquita. El viernes lo llevé al veterinario porque nos recomendaron desparasitarlo antes de meterlo en casa. Como no paraba de rascarse las orejas, allá que me fui. El veterinario le dio una especie de jarabe y me advirtió que seguramente iría un poco flojo. Al llegar al casa vomitó y pensé que no le habría llegado a hacer efecto. Sin embargo, a partir del día siguiente empezó ha hacer cacas líquidas. Esta mañana nos hemos despertado con el regalito esparcido por medio piso. No lo hace fuera de la caja de arena, pero muchas veces, sin darse cuenta, lo pisa con la pata, se pringa y luego lo va pringando por el piso. Después del regalito de esta mañana, hemos visto que igual la cosa ya no era normal, así que he vuelto a ir al veterinario. 

Madre mía, qué mal lo hemos pasado. A Gato no le ha gustado nada. Ha gritado de dolor con el termómetro por vía rectal y con el pinchazo que le han puesto. Me ha arañado y luego se mostraba muy enfadado. Le han recetado también una especie de crema o pasta que debe ingerir vía oral y que sirve para regenerar su flora intestinal. Al menos eso le ha gustado. Después de una gran siesta al solecito, esta tarde volvía a jugar en su pequeño parque de atracciones casero.

Un tronco con una cuerda y algunos objetos para entretenerse. 
Bueno, la crónica ha devenido algo escatológica, pero confiamos en que el medicamento le empiece a hacer efecto pronto, sobretodo por él, porque creo que tampoco se siente cómodo con ello. Bien, pues este es Gato y estos han sido sus primeros días en casa. Estamos encantados con él. Nos hace reír mucho y se ha convertido en el rey de la casa. 

Otro motivo que me hace sonreír estos días es el aluvión de premios que he recibido estos días. Mañana me pongo con ello. Además, hoy nos han mencionado (a Papá Mimoso, al gatete y a mi) en esta entrada de Bebés y Más y me ha encantado. Tengo un gato famoso, je je. Bueno, mañana más. Un abrazo. 

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Padres adoptivos por partida doble



Esta mañana Papá Mimoso y yo hemos presentado la solicitud de adopción nacional. Quizás no había hablado antes en este blog de la posibilidad de adoptar, pero llevábamos ya un tiempo considerable pensando en esta posibilidad. En las últimas semanas hemos estado buscando información, rellenando la solicitud y hablando mucho del paso que estamos dando. 

Además de entregar la solicitud, esta misma mañana hemos asistido a una interesante sesión informativa, organizada por Bienestar Social, donde hemos podido aclarar muchas dudas. Realmente estamos muy contentos después de haber asistido a esta charla y al salir nos hemos sentido reafirmados en nuestra decisión. Que hayamos dado este paso no significa que vayamos a dejar de lado la posibilidad de tener un hijo biológico. Al contrario, nos encantaría tenerlos de los dos modos y seguiremos luchando por conseguir un embarazo. 

Por el momento, sólo hemos presentado la solicitud de adopción nacional. Actualmente, según nos han comentado en la reunión, en la Comunidad Valenciana se están asignando niños a las familias que realizaron su solicitud en 2006. Es decir, estamos hablando de 6 años de espera. Pero estas cifras pueden variar en cualquier momento y probablemente irán al alza. En el último lustro ha habido un incremento muy significativo del número de solicitudes, por lo cual el ritmo de asignación cada vez va a resultar más lento. Obviamente, si una familia incluye en su solicitud el deseo de adoptar niños con necesidades especiales probablemente tenga que esperar menos tiempo. En nuestro caso, hemos solicitado un bebé de 0 a 2 años, sin preferencia por un sexo u otro y además la posibilidad de adoptar un grupo de hasta dos hermanos. 

También se ha hablado en la reunión de la adopción internacional y realmente el panorama no es mucho mejor que en España. La administración española está encontrando cada vez más dificultades para tratar con ciertos países. Algunos, como Filipinas y Vietnam, han cerrado las puertas a nuevas solicitudes y otros, como China, han endurecido mucho los requisitos para poder adoptar. Realmente el panorama no es muy bueno y ese es uno de los motivos por los cuales cada vez más las familias españolas se decantan por la adopción nacional. 

Bueno, ¿y a partir de ahora qué?  Pues vamos a tardar aún muchos años en recibir una llamada de la Generalitat para iniciar el proceso de valoración que conduce a la declaración de idoneidad. Nos han hablado de unos 4 o 5 años. Una vez nos llamen, tendremos que asistir a unas sesiones formativas y deberemos pasar diversas entrevistas con los técnicos de Bienestar Social. En cualquier caso, hemos salido de la reunión con la sensación de que pase lo que pase (tengamos hijos biológicos o no) no vamos a paralizar esta solicitud. Creo, por estúpido que parezca decirlo a estas alturas, que ya llevamos una parte de ese futuro hijo en nuestro corazón. 

¿Sorprendid@s con esta noticia? Pues aún hay algo más. Hace también un tiempo que Papá y yo empezamos a hablar de la posibilidad de adoptar un animal para casa. A los dos nos encantan los perros, pero somos conscientes de que necesitan mucha más atención que otro tipo de animales domésticos. Al final nos planteamos adoptar un gato y se lo comenté a un amigo que tiene una tienda de alimentación para animales, por si conocía a algún cliente que hubiera tenido gatitos recientemente. Pues en menos de una semana nos ha encontrado uno. Es macho y tiene a penas mes y medio de vida. Ayer fuimos a hablar con la dueña y a conocerlo, y nos quedamos prendados. 


Es gris, con muchas rayas, como el de la foto, y seguramente lo traeremos a casa en un par de días. Necesitamos comprarle algunas cositas primero y decidir un nombre para él. Se admiten sugerencias y consejos de mamá gatuna, que sé que sois una cuantas. Gracias por estar ahí.